Otra vez Rijkaard quiso hacer de entrenador.

Después de unas semanas tranquilas, donde todo había vuelto a la normalidad en el equipo, de nuevo Rijkaard nos sorprende con decisiones extrañas. El principio fue descartar a Eto'o por una supuesta lesión, después a la hora del partido nos encontramos de nuevo con los tres defensas, y de ahí hasta el final lo mismo de semanas atrás.

¿A qué juega este equipo?. Cuando se ve en situación complicada reacciona, y después cuando los propios rivales fallan y se autodescartan, vuelve a las andadas y con decisiones absurdas, se complica la vida. Con el juego que estaba desplegando estaba claro que en la Liga no tenía rival, porque el Sevilla sólo está preocupado por la UEFA, y el peor Real Madrid de los últimos años, tiene un final de Liga con encuentros más complicados, pero claro si continuan los disparates, puede regalar un título que debía estar casi resuelto desde hace un par de meses.